osteítis
La osteítis se considera una afección rara y grave, ya que afecta a dos personas de cada diez mil personas, y afecta a personas de todas las edades, pero es más grave y rápida en los niños, y afecta a personas con algunas enfermedades crónicas como diabetes o enfermedades vasculares. Las bacterias periféricas son más susceptibles a esta infección que otras. En la mayoría de los casos, la bacteria esférica Staphylococcus aureus es la principal causa de infección ósea, y puede transmitirse al hueso de varias maneras, como diseminarse a través del sangre desde un lugar susceptible a la infección dentro del cuerpo hasta los huesos. Las fracturas abiertas o las cirugías, como el reemplazo de rodilla, exponen el hueso a la infección.
Síntomas de la osteoartritis
Puede resultar difícil distinguir entre la osteoartritis y algunas otras enfermedades en casos específicos. Esto se debe a que no hay síntomas distintos, especialmente en niños, ancianos o personas infectadas con VIH. Los síntomas de la osteoartritis incluyen los siguientes:
- Pus saliendo de la piel.
- Temperatura corporal elevada.
- Falta o pérdida de la capacidad de mover la articulación.
- Náusea
- Dolor en la zona afectada.
- Cambio en el estilo de caminar o incapacidad para soportar el peso corporal en los niños.
- Sudoración excesiva.
- Hinchazón de piernas, tobillos y pies.
- Hinchazón, enrojecimiento y calor de la zona afectada.
- Una sensación general de malestar.
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Complicaciones de la osteoartritis
Existen muchas complicaciones de la osteoartritis, algunas de las cuales son las siguientes:
- Infección con artritis séptica: Es una afección en la que la inflamación se extiende a las articulaciones adyacentes al hueso afectado.
- Muerte ósea: La inflamación impide la circulación sanguínea dentro del hueso afectado, provocando su muerte.
- Cáncer de piel: La piel rodeada de inflamación es más susceptible al cáncer de células escamosas.
- Mal crecimiento en los niños: Especialmente si se inflaman las placas de crecimiento, que son las zonas blandas que se encuentran en ambos extremos de los huesos de brazos y piernas.